Somos Todos Iguales
Me imagino en un café, conversando con el color rojo, el negro y el azul y tratando de convencerlos de que ellos son iguales! en el fondo, son todos colores! O caminando junto a un par de notas, que podrían ser el Si y el Sol y convenciéndolas de que no tienen ninguna diferencia una vez agrupadas en la categoría notas! En cualquiera de los dos casos, no estaría cometiendo ningún error de clasificación, porque lo cierto es que el rojo, el negro y el azul son colores, como el Si y el Sol son notas, independientemente de la fascinante capacidad de algunas personas de oír colores o ver sonidos (Sinestesia).
"Somos todos iguales" reza una de las banderas más caminadas de la lucha contra la discriminación. ¿Somos todos iguales? De solo pensarlo, me abandona en el acto la esperanza sobre un mundo mejor.
Si educamos a nuestros niños convenciéndolos de que somos todos iguales, no habrá riesgo de equivocarnos, pero sí estaríamos desaprovechando el importante del valor de la diversidad. Imaginemos estos dos mensajes desde la perspectiva de un niño:
Mensaje 1: No a la discriminación!
- Somos todos iguales y eso lo tenes que aceptar aunque toda tu vida la gente te muestre matices que pongan en riesgo esta verdad universal. En el fondo somos todos iguales: seres humanos. Las diferencias dentro de este grupo (seres humanos) son accesorias, no esenciales. Por tal motivo, tenes que tratar a TODOS por igual! sin caer en alguna diferenciación que pueda ser discriminatoria! Porque ya verás que la gente esta cada día más sensible con este tema y digas lo que digas o hagas lo que hagas, siempre terminas por hacer sentir discriminado a alguien!
Mensaje 2: Sí a la diversidad!
- ¿Sabías que una de las mejores cosas que tenemos como humanidad es que cada uno de nosotros es único? Cada uno termina siendo una combinación única de experiencias, características físicas, creencias, emociones, etc. que dan como resultado a un ser único e irrepetible en cada momento. Si aprendés a descubrir y valorar la diversidad que cada ser tiene para ofrecerte, podrás conectarte con lo mejor de cada uno, alimentándote de por vida de lo que hace a cada uno único y del paisaje que te ofrece esa diversidad casi infinita de sonidos y colores! No somos todos iguales! y eso es lo maravilloso! Abracemos la diversidad! Esto nos permitirá algún día vivir en armonía como humanidad!
Solo el miedo y la pereza de descubrir a cada ser único que nos rodea e incluso a nosotros mismos, nos invita a clasificar, agrupar y etiquetarnos rápidamente. Nos angustia tanto el hecho de no saber y convivir con la incertidumbre, que entonces, en pocos minutos nos sentimos tranquilos de tener claro a quién tenemos en frente: "al típico" Ingeniero, Camionero, Arquitecto, Empresario, Am@ de casa, Médico, etc. (clasificación por lo que estudiaste o haces) o Cristiano, Judío, Musulman, Evangelista, etc. (por su religión) o de un Homosexual, Heterosexual, Bisexual, Trisexual, y así siguiendo con tantas categorías como sean necesarias para equilibrar la angustiante inseguridad del etiquetador.
El problema se agrava cuando uno mismo, para saber quién realmente es, necesita etiquetarse diciendo, por ejemplo: Soy Argentino, Soy Ingeniero, Soy Homosexual, Soy Creyente, Tengo tal discapacidad, etc. El tema es que esta clasificación termina por creer que pertenecer a estas categorías te da identidad e incluso estas son las categorías que están en lo correcto, otras no tanto y otras definitivamente están equivocadas! Cuando eso ocurre, es cuando los etiquetadores dicen: "Somos todos iguales, pero solo por las dudas que se encuentren con alguna persona diferente, seamos tolerantes".
¿Seamos Tolerantes?
Cuando uno ama al otro y no solo lo acepta como es, sino que lo valora por regalarnos esa diferencia o diversidad, no hay nada que tolerar y hay un todo por agradecer! Deberíamos ser más agradecidos con aquellas personas que valientemente se atreven a regalarnos esa diversidad generosamente! De lo contrario ¿Cómo sería? ¿Un heterosexual "tolerando" a un homosexual? ¿Un Cristiano "tolerando" a un Judío? ¿Un Ingeniero "tolerando" a un Arquitecto (para vos Toto! ;-) )? entonces, deberíamos tener como contrapartida un homosexual teniendo que tolerar a un heterosexual, un judío tolerando a un cristiano, etc. ¿Estamos todos locos? ¿Tan difícil es darse cuenta que no hay nada que tolerar? No se trata de "tolerar" que somos diferentes, se trata de aprender a valorar que así sea! Creemos que el problema religioso en medio oriente es la falta de tolerancia. La isla Mauricio es una prueba viviente hasta en sus órganos de gobierno de valoración de la diversidad. Tolerar implica aguantar, resistir con sufrimiento y esto tarde o temprano termina por explotar por acumulación de "tolerancia". La tolerancia tiene un límite, el amor no!
Agricultores del odio
No puedo creerle a consagrados manipuladores que nos quieren convencer/demostrar con "hechos, ciencia e historia" y evidencia objetivas que alguien puede ser peor que nosotros por su religión, nacionalidad, preferencia sexual, etc. Cualquiera sea el argumento y los medios utilizados para sembrar y cultivar el odio, rencor y sensación de superioridad por sobre otros seres, no merece mi atención! Aunque tuviera "razón", no lo necesito! gracias! ;-) Lo simpático del caso es que generalmente son esos agricultores del odio los mismos que nos piden tolerancia! (un tanto perverso ¿no?)
La gente que le hace daño a los demás no pertenece en forma exclusiva a ningún grupo o clasificación que podamos generar. Hay de todo en todas partes y nadie es ni tan malo ni tan bueno (al estilo película de Disney).
Quiero dedicar el resto de la segunda mitad de mi vida a despojarme de prejuicios, de liberarme de la necesidad de etiquetar a los demás y a mi mismo. Quiero aprender a conectarme con la mejor parte de cada elemento o ser que me rodea (personas, lugares, actividades, etc.) y crecer a partir de toda esa diversidad.
Creo en la línea espiritual/pensamiento que abrace la diversidad en su plenitud y que se base solo en el amor las interacciones con cada elemento que nos rodea (otros humanos, animales, plantas, ecosistema en gral.).
¿Nos animamos a no etiquetar? ¿Te preguntaste de donde vienen cada uno de tus prejucios? ¿Sos realmente mejor que los demás? ¿Cuál es el riesgo que encontras en la diversidad? ¿Te da miedo? ¿Como lo resolverías? ¿Te animás a desafiar un prejuicio por semana?
Daniel
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